ITALIA
En Italia
podemos observar que hay una clara herencia medieval, lo cual se verá
en el Renacimiento e influirá también en la formación de unidades
territoriales.
En cuanto a
su distribución, al centro se encuentran las tierras del Papado y al sur el
Reino de Nápoles. Cabe destacar que las islas de Sicilia y Cerdeña son el
objetivo de Francia y España, por su riqueza y por su posición estratégica.
- Como ducado encontramos
Milán, ocupado militarmente por Luis XII de Francia, a causa de lo cual se
forma la Liga Antifrancesa (el Papado, Fernando el Católico y El Emperador).
Después en 1540, Carlos V manda a su hijo Felipe II que pase a ser el dux.
- La
aristocrática República de Venecia es poderosa por su gran capacidad militar,
pues dispone de una flota de galeras y crean un imperio colonial. Con el
Tratado de Noyons (1516) consigue hacerse
independiente, aunque después los turcos invaden el territorio.
- Otra gran
república es Génova aunque se trata de una ciudad más débil, ya que los turcos
se apoderan de sus dominios coloniales. En el siglo XVI depende de Francia
aunque tras la expulsión de los franceses se proclama una nueva constitución.
- Florencia
tiene varias repúblicas: una provocada por una sublevación popular, liderada
por el general Savoranola. La otra se restaura después de la ejecución del
general y es de carácter tradicional. Durante el siglo XVI los Médici se hacen
con el poder constantemente, donde destaca el Estado Hereditario con Giuliano
de Médici.
En este
contexto caracterizado por la inestabilidad, los papas participaron mucho en
las disputas que las potencias europeas libraban en Italia.
También es
de suma importancia la hegemonía española en territorios italianos, como el
dominio que libra España en Nápoles con la figura de Gonzalo Fernández de
Córdoba.
EL IMPERIO GERMÁNICO
En el
Imperio Germánico destaca el papel del emperador, quien apenas tiene poderes ni
un ejército permanente, ni sistema fiscal fijo. Es elegido por la Dieta: una
asamblea formada por los siete príncipes territoriales que representa a los
distintos poderes. La Dieta aprobaba los subsidios y daba ayudas económicas.
Años más
tarde, su nieto Carlos V (Rey de Castilla y Aragón) le sucede. Tras una
temporada en España, al regresar a Alemania, intenta frenar el avance turco (1530)
en una época influida por los Escritos de Lutero y la Reforma Protestante. Se enfrentan
los príncipes protestantes y el emperador (ya que éstos no acuden al Concilio
de Trento,1545) conflicto que derivará
en la Guerra de Esmalcalda(1546-1551) y que se da por concluido con la Paz de Augsburgo (1555). Dicho acuerdo propone que cada territorio se correspondiera a la religión de su autoridad política.
Entonces la
segunda mitad del siglo XVI se caracterizará por una “inusual tranquilidad”, a
pesar de mantenerse una división religiosa en el Imperio Germánico.
Interesante e instructivo.
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